***Las dos menores están en el DIF y se rehúsan entregarlas a su familia
Bernardo Torres/API
Chilpancingo, Gro.
8 de noviembre de 2020.
La Fiscalía General del Estado de Guerrero (FGE) niega justicia a dos menores de edad que fueron secuestradas y violadas en Iguala, denunció la madre de las víctimas, la señora Constantina Morales Luna.
Las menores Ernestina “N” de 14 años y Gregoria “N” de 16 fueron reportadas por su madre como desaparecidas desde el pasado 14 de julio del presente año, activando la Alerta Amber, de los hechos ocurridos en el Mercado Baltazar R. Leyva Mancilla de Chilpancingo.
El 17 de julio fue localizada la menor Ernestina “N” en la ciudad de Iguala de la Independencia, quien dijo que se encontraba con una persona de nombre Zen “N” de aproximadamente 45 años, en contra de quien la FGE informó se le investiga por su probable responsabilidad en la comisión de un delito.
Posteriormente, el 27 de noviembre, agentes Ministeriales de la Fiscalía de Guerrero localizaron a Gregoria “N” en Chilpancingo, la cual se encuentra con cuatro meses de embarazo, de quién no se informó donde fue localizada, y también se encontraba presuntamente con su pareja, también menores de edad.
Las menores fueron presentadas ante sus padres, a quienes se les informó de la situación jurídica y derivado de los datos de prueba que obran en la carpeta, las dos menores localizadas y su hermano, fueron trasladados a la Casa Hogar del DIF.
Sin embargo, este martes en conferencia de prensa, la señora Constantina, informó que en la FGE se niegan a investigar a los responsables de la privación de la libertad de sus hijas, quienes además fueron violadas, y el resultado de ello es que una está embarazada.
La madre de las menores señaló a Agustín Morales Rivera, María Reyes Prieto y otra persona a quien sólo identifica como Pablo, yerno de Agustín, como los responsables del secuestro de sus hijas a quienes tuvieron varios meses y por quienes recibieron dinero.
En la FGE les han dicho que no hay delito que perseguir, pues las adolescentes se fueron por su voluntad, lo que dijo es incongruente porque uno de sus victimarios tiene más de 45 años.
Las dos menores le han manifestado a la madre que quieren regresar a su casa, sin embargo, se las niegan en el DIF, donde argumentan que investigan presunta violencia intrafamiliar, lo cual también la madre negó de manera insistente.
A raíz de esta situación dijo que ha recibido amenazas de muerte por teléfono, donde le dicen que si sigue moviendo el caso van a matar a toda su familia.
Doña Constantina, tiene siete hijos en total, y su esposo es discapacitado sin trabajo, ella sale a diario a vender dulces en las colonias acompañada de su hija más pequeña de seis años, a quien también el DIF pretende quitarle, argumentando que la pone en riesgo.
Hizo un llamado a las autoridades a que atiendan su caso, se haga justicia y se castigue a los responsables de este delito, además de que le entreguen a sus hijas.