· Lamentan que el Presidente de la República “simuló escucharlos” cuando lo interceptaron en la carretera para pedirle seguridad y justicia.
· Aldy Esteban Román protegió a “Los Ardillos” desde la Fiscalía General del Estado y ahora lo hace desde la Presidencia Municipal de Chilapa; acusan.
Jonathan Cuevas | API Guerrero
Chilpancingo, Gro. | 8 de noviembre de 2022
El pueblo de Alcozacán despidió este lunes a los tres integrantes del Concejo Indígena y Popular de Guerrero “Emiliano Zapata” asesinados el pasado sábado. En la cancha de la localidad, ante los cuerpos presentes, condenaron: “se lo dijimos al Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, nos están matando, torturando, desapareciendo”.
Entre el llanto y la exigencia de justicia, lamentaron que el pasado 05 de noviembre, López Obrador “simuló escucharlos”, por lo que hoy nuevamente tienen que llorar a sus muertos.
Además advirtieron que el alcalde de Chilapa, Aldy Esteban Román fue trabajador de la Fiscalía General del Estado y desde ahí otorgaba protección al grupo criminal identificado como “Los Ardillos”, igual que lo hace ahora desde la silla presidencial, así como, aseguraron, también lo hace el diputado perredista Bernardo Ortega Jiménez.
En un comunicado de prensa que difundieron este día, informaron que el pasado 21 de octubre cuando interceptaron al Presidente Andrés Manuel a su paso por la carretera Chilapa-Tlapa, le aclararon que no querían programas sociales sino justicia para las personas de sus pueblos que han sido asesinadas, para las personas que han sido desaparecidas, y que su voz fuera escuchada de verdad.
“Andrés Manuel López Obrador simuló escuchar nuestras palabras; sin descender de su transporte, varios de nuestros hermanos y hermanas del CPOG-EZ le dijimos que nos estaban matando, le dijimos quiénes, con nombres y apellidos, dónde y cómo. Pero tal como si nada hubiera sido dicho y estuviéramos condenados a repetir la misma historia, a llorar a nuestros muertos y nuestros desaparecidos, el 5 de noviembre tres de nuestros hermanos fueron asesinados”, señalaron.
“Muchos de nuestros compañeros bajan al municipio a vender sus productos y ya no vuelven, se quedan ahí y siguen desapareciendo. Así de claro le dijimos a Andrés Manuel López Obrador. Tal como si se pudiera predecir lo que va a pasar, Adán, Guillermo y Moisés, indígenas nahuas de la Montaña Baja de Guerrero pertenecientes al CIPOG-EZ y al Congreso Nacional Indígena (CNI), bajaron al Municipio de Chilapa y ya no volvieron, fueron brutalmente asesinados”, abundaron.
Sobre el gobierno municipal de Chilapa, advirtieron que el alcalde priista Aldy Esteban otorga protección al grupo criminal en mención, mientras que los cuerpos de la policía y de tránsito operan para el narco, y ejemplo de ello es que Adán, Guillermo y Moisés fueron retenidos por agentes viales antes de ser perseguidos y asesinados.
“El gobierno Municipal está gobernado por Aldy Esteban Román (PRI). Este personaje, pasó por la fiscalía del estado de Guerrero, desde donde al igual que hoy, protegía a los Ardillos, grupo narco-paramilitar de amplia influencia en el estado de Guerrero”, indicaron.
Y agregaron: “El integrante, uno de los líderes y protector, operador político de los Ardillos, es Bernardo Ortega Jiménez, diputado (PRD), quién ha mencionado que no tiene nada que ver con sus hermanos (o sea que acepta que son delincuentes pero como servidor público pasa por alto la violencia que generan, lo cual lo vuelve cómplice y por tanto integrante y protector de los Ardillos, si ese fuera el caso; pero aunque lo niegue, nosotros sabemos que integra activamente al grupo criminal)”.
“Las policías municipales están coludidas con los Ardillos. Esto ya era más que evidente, hace unos meses en Atlixtac 2 de nuestros hermanos fueron detenidos y desaparecidos por la policía municipal de Atlixtac.
En esta ocasión, la policía de tránsito del Municipio de Chilapa fue la que se encargó de detener e identificar a los miembros del CIPOG-EZ para luego informar a los Ardillos y que estos los asesinaran.
Lo mismo ocurre en el Municipio de José Joaquín de Herrera, donde también han desaparecido a otros de nuestros hermanos”, añadieron.
Más aún, insistieron en que la respuesta de Andrés Manuel a los planteamientos del CIPOG-EZ, fueron las mismas “ideas sueltas”, en las que apela a la historia “sin comprensión de los procesos históricos, sin conectar las causas y consecuencias”.
“Mencionó: Nada más una cosa les digo con toda sinceridad, eviten la violencia hay formas de luchar, la más eficaz de todas es la no violencia, esa la llevó a la práctica, esa política de no violencia, Gandhi, Mandela, Luther King y nos enseñaron que sí se puede de manera pacífica cambiar las cosas, no hay que caer en una provocación, hay que sacarle la vuelta a la provocación y hay que buscar el cambio por la vía pacífica y nosotros vamos a seguir actuando así de manera pacífica y sin relaciones de complicidad con nadie”, recordaron.
Por ello, aclararon: “Nosotros respondemos: seguir llamando a la no violencia en un escenario de guerra, sin detener a quienes la generan, sin atacar las causas de la violencia, económicas, políticas, sociales, culturales, es un absurdo”.