· La reactivación económica en esta zona de la Región Norte de Guerrero, ha frenado la migración hacia Estados Unidos y, ha provocado el retorno de migrantes
Jonathan Cuevas | API Guerrero
Teloloapan, Gro. | 31 de octubre de 2022
A dos años de haber reiniciado labores en el municipio de Teloloapan, Región Norte de Guerrero, la minera Capela de la empresa mexicana Peñoles le apuesta a la contratación de mano de obra femenina, con lo cual se han roto tabús y han mejorado la economía de las familias en esta zona, según relatan algunas trabajadoras.
En la mina se extrae zinc, plomo, plata y un poco de oro. Está instalada en terrenos de seis comunidades de Teloloapan, por lo que se ha convertido en una alternativa de trabajo para los habitantes de Tepezolquito, Ahuehuitlan, Tehuixtla, Zacuapa, Zacatlán y Tule, pues la mayoría de los pobladores han decidido emplearse como mineros o proveedores de productos o servicios.
Esto ha logrado no solo disminuir la migración hacia los Estados Unidos, sino el retorno de personas que se habían ido a buscar una mejor vida en aquel país.
Pero además, Peñoles se ha convertido en la primera empresa minera que le apuesta a la contratación de mujeres, no sólo para trabajos administrativos sino también operativos, incluso en el uso de maquinaria pesada dentro de la mina.
Actualmente del total del personal, un 19 por ciento son mujeres, pero para Peñoles la meta es llegar al 30 por ciento el próximo año, pues están convencidos de que las mujeres son más disciplinadas, responsables y, sobre todo, disminuyen el riesgo de accidentes.
Testimonios
Como proveedora de alimentos trabaja María Inés, oriunda de la región, quien tenía una taquería afuera de la mina y Peñoles le dio oportunidad de ser la proveedora oficial de alimentos, por lo que ahora, junto a su esposo crearon una empresa en la que emplearon a 20 personas más.
“Llevamos un año diez meses ya con la empresa. Ahorita estamos proporcionando 160 desayunos, 120 lonches para todos los contratistas que vienen a trabajar aquí a minera Capela y bísquet. Capela nos ayudó a crear la empresa desde un inicio, nos apoyó en capacitaciones y también nos ayuda por medio de la nutrióloga”, expresó.
Luz Yaneli lleva tres años y medio trabajando en la mina y actualmente es encargada de operar una máquina barrenadora, con la cual se penetra la tierra para que después se metan explosivos que provoquen la exposición de los metales o residuos que buscan.
Es originaria de la cabecera municipal de Teloloapan y tiene 25 años de edad. A la par de su trabajo en Capela, estudia la universidad donde está a punto de graduarse para lo cual está realizando un proyecto dentro de la mina, que consiste en la creación de una maquinaria para barrenar que trabaje por medio de programación, son necesidad de que alguien la opere todo el tiempo.
Cinthia es otra de las mujeres que laboran en la mina. “Me siento muy contenta de tener un trabajo cerca de casa y de desempeñar una actividad que me gusta mucho”. Ella es encargada de llevar los ciclos de procesos en el área de barrenación, desde organizar un turno hasta que concluye, y así sucesivamente.
Según cuenta, está por cumplir cuatro años laborando aquí, tiempo en el que considera que le ha cambiado la vida igual que a sus compañeras y compañeros de esta región de Teloloapan, pues afirma que tienen un buen salario y por ende una mejor calidad de vida, incluso en su caso a pesar de que su trabajo anterior no era malo, pues se encargaba de elaborar proyectos para el Gobierno del Estado de Morelos.
En esta mina también se puede encontrar a Candelaria Estrada quien es operadora de vehículos de carga para el traslado de material, mismos que tienen un peso de 50 toneladas, y 100 toneladas cuando van cargados.
“Llevo casi tres años con diez meses trabajando con Peñoles. Soy originaria de Teloloapan, Guerrero, y para mí es bonito y una experiencia trabajar aquí, porque es la primera vez que yo opero esta maquinaria y es la primera vez que también trabajo en una mina, cuando anteriormente yo era empleada doméstica”, relató.
Guadalupe Mancilla también es operadora de estos camiones, y es originaria de Tulizacuapa, uno de los pueblos que rodean la mina. Lleva casi cuatro años operando estos vehículos pesados, lo cual la hace sentir orgullosa.
“La verdad estamos contentas de que Capela nos deja trabajar aquí en la mina porque la verdad se escuchaba que en otras minas puro hombre bajaba a la mina, pero a nosotras nos han dado la oportunidad y nos sentimos contentas de tener un trabajo cerca de nuestra comunidad”, señaló.
Al contar su experiencia, aceptó que nunca se imaginó que trabajaría dentro de la mina, aunque antes de ser operadora de camiones de carga, estaba laborando en el comedor.
“Trabajaba para atender a los ingenieros, pero una vez se acercó el licenciado Loza y me comentó que había oportunidad para pasarse con Capela, y me dijo si me gustaría entrar a la mina y manejar un camión de estos, pero le dije que cómo iba operar un camión si no sabía manejar ni bicicleta, a lo que me respondió que tendría una capacitación en Coahuila, y es como acepté”, contó Guadalupe.
Reactivación de la Mina
Capela es una mina subterránea de más de 15 kilómetros de extensión que alcanzan más de 400 metros bajo tierra.
Comenzó sus trabajos de exploración en el año 2000 pero un año después cerró por el precio de los metales y conflictos sociales, por lo que reabrió sus puertas en el año 2020 porque las condiciones sociales mejoraron. Antes, tuvo su etapa de exploración durante varios años.
En una extensión de casi 171 hectáreas, Peñoles consiguió un permiso de vigencia hasta mayo del 2029 por parte de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, mismo que va acompañado de reforestaciones y apoyo a las comunidades cercanas, por lo cual han llevado obras y acciones en beneficio de los pueblos de la zona.