Jonathan Cuevas | API Guerrero Chilpancingo, Gro | 7 de junio de 2022
Pobladores de Petaquillas bloquearon el acceso a su comunidad y retuvieron a un grupo de militares, para exigir que cesen los operativos del Ejército y demás corporaciones, así como la reinstalación de retenes de su policía ciudadana en la carretera México-Acapulco.
Este hecho se da en medio de una brutal guerra entre grupos de la delincuencia organizada, que inició ayer con cuatro ataques armados en la ciudad de Chilpancingo, que a su vez dejó al menos tres muertos y dos heridos, así como la quema de seis vehículos del transporte público, en su mayoría, del poblado de Petaquillas.
Este mediodía, tres camionetas del Ejército Mexicano entraron a Petaquillas y fueron retenidas por pobladores en la colonia Xocomulco, bajo el argumento de que estaban cometiendo abusos y que habían realizado detonaciones de arma de fuego sin motivo alguno.
El comisario Efrén Romero Cabrera señaló que tenían información de que convoys militares se estaban apostando alrededor del pueblo, por lo que literalmente “los tenían sitiados”.
“Yo quiero hacer un llamado a la gobernadora, a la presidenta municipal y al presidente de la República, que su algo nos llega a pasar a nosotros como pobladores, los hacemos directamente culpables de estas cosas que no se pueden dejar ir siguiendo, como ahorita que está reventando todo”; apuntó.
Alrededor de las 13:00 horas, otro grupo se pobladores colocó piedras, neumáticos y otros objetos sobre la via de accesos a su comunidad en el entronque con la carretera federal México-Acapulco, donde mantenían bloqueado hasta el cierre de esta nota.
En el lugar se acostaron diversos operativos de elementos de la Policía Estatal, Guardia Nacional y Ejército Mexicano, pero los pobladores no les permitieron el acceso, incluso, les exigían retirar sus operaciones.
Iniciaron un diálogo con representantes de Gobernación de la Secretaría General de Gobierno del Estado de Guerrero, a quienes les solicitaron que pudieran el retiro de las autoridades federales y estatales en materia de seguridad, y que permitieran que su policía ciudadana continuara sus operaciones para brindar seguridad en la zona.
Hasta las tres de la tarde la situación de tornaba cada vez más tensa y los pobladores continuaban sus acciones de protesta, mientras el transporte público que conecta a esa comunidad con Chilpancingo, estaba suspendido desde tempranas horas producto de la narco violencia.