Juan Blanco | API Guerrero | Chilpancingo, Gro | 21 de marzo de 2022
La Coordinadora Estatal de los Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), lamentó y condenó las declaraciones que hizo el obispo de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, en el sentido de que las autoridades deben actuar contra sus bloqueos carreteros.
En un comunicado que publicó en su página oficial de Facebook, la Coordinadora recordó que el prelado católico siempre ha dicho ser un “predicador de la palabra de Dios”, por lo que, en lugar de hacer un llamado a la reflexión, la conciliación, a la redención y a la paz social en estos tiempos de cuaresma, “todo lo contrario, hace un llamado a la violencia, violando todo lo que lo representa como autoridad de una Iglesia”
“Lamentamos que una persona que debe ser predicador de paz y amor, pregone la violencia y la represión en contra de los educadores del pueblo, que sólo luchan por demandas justas y legítimas”, aseguró.
Citaron: “Ya lo dijo Jesús de Nazaret, el primer gran revolucionario de la historia: ‘Dar al César, lo que es del César y a Dios lo que es de Dios'”; sin embargo, reprochó que “si tan solo la Iglesia y su estructura fueran obedientes a este mandamiento cuantos males por injerencia eclesiástica nos hubiéramos evitado”.
La CETEG reconoció que sus acciones causan molestias a la ciudadanía, “pero esta jornada de lucha se pudo evitar, los bloqueos se pueden evitar si tan solo las autoridades del estado dieran solución y no simulación”.
Ante ello, llamaron a Monseñor “a que, en lugar de estar incitando a la violencia, le abone al diálogo, y en lugar de pedir a la Gobernadora que use toda la fuerza del estado en contra del magisterio, sea interlocutor y promotor con carácter resolutivo”.