“Va correr sangre si no detienen la tala de pinos en la Sierra”; advierten ejidatarios al Gobierno

Juan Blanco/API
Chilpancingo, Gro.
4 de febrero de 2021.

 Ejidatarios y habitantes de Jaleaca de Catalán, comunidad ubicada en la Sierra de Chilpancingo, marcharon este jueves en la ciudad capital para exigir a las autoridades estatales y ambientales frenen la tala moderada e indiscriminada de árboles en esa zona de la región Centro de Guerrero.

La movilización, en la que participan unas 200 personas, partió del parque Margarita Maza de Juárez, al norte de la ciudad, y se prevé culmine en la sede del Recinto del Poder Ejecutivo, en donde una comisión será recibida por el gobernador Héctor Astudillo Flores.

Entrevistado en el transcurso de la marcha, el comisario ejidal Marco Antonio Arcos Fuentes denunció que, desde hace más de 10 años, habitantes de la colonia General Heliodoro Castillo (Chicahuales), situado en este municipio, han venido explotando de manera indiscriminada recursos maderables en terrenos del Ejido de Jaleaca.

Aseguraron que dichas actividades las han realizado con la ayuda de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y de dependencias de esta misma índole en el estado.

El comisario no precisó cuántas hectáreas ya llevan taladas, pero sí advirtió que si no se detiene pronto podrían secarse todos los “veneros de agua” de la que dependen miles de familias tanto de Jaleaca como de la zona baja de la Sierra, conocida como Pueblos Santos (Santa Rita, San Miguel, Santa Barbara, San Cristóbal, Santa Rosa, entre otros).

Incluso, alertó que podría secarse el Río Papagayo que conecta con el de Omitlán, en el municipio de Tierra Colorada, mismos que van a desembocar a la presa de La Venta, en Acapulco.

Arcos Fuentes también advirtió también que, si las autoridades no intervienen, podría suscitarse un conflicto armado con Chicahuales. “Va a correr sangre”.