***Familiares de pacientes pernoctan al aire libre para recibir noticias de sus enfermos.
Lourdes Cobos/NOTYMAS
Acapulco, Gro.,
14 de diciembre de 2020
Junto con sus unidades, choferes de los colectivos “amarillos”, este lunes por la mañana realizaron un bloqueo a las afueras del Hospital General de El Quemado, para demandar atención urgente para su compañero Moisés Altamirano Pérez, quien lleva 8 días internado a consecuencia de una obstrucción intestinal.
Más tarde, y luego de una operación que tardó tres horas, el diagnóstico de Moisés Altamirano es “delicado” en virtud de que se le localizó y retiró un tumor en el colon.
Por la mañana, la hermana de Moisés, Yolanda, explicó que desde hace 8 días su hermano fue internado debido a que presentaba obstrucción del intestino, por lo que el excremento que generaba “tenía que buscar una salida y se fue a la vejiga y su pene expulsaba la popó”, lo que le causaba intensos dolores.
Aseguró que el lunes pasado, Moisés acudió con su doctora al hospital, quien determinó hacerle unos análisis urgentes “que costaron 2 mil 200 pesos, y cuando se los mostramos dijo que tenía que ser operado, pero no lo hicieron”.
Al paso de los días, Moisés no mejoraba y los fuertes dolores eran insoportables, narró Yolanda, por lo que pidió el apoyo de los compañeros de trabajo de su hermano para realizar la manifestación y el bloqueo, cuya duración dependería de la respuesta de las autoridades sanitarias.
La respuesta llegó y a las 13 horas Moisés fue intervenido quirúrgicamente; a las 16.30 horas fue trasladado a piso; al cierre de la nota aún no recuperaba la conciencia.
Pero, aunque de la operación salió bien, “le encontraron un tumor en el colon, y estamos esperando el resultado de los análisis (de laboratorio) para que los médicos digan si es benigno o maligno”, dijo Yolanda.
A LA ESPERA DE NOTICIAS
Asimismo, a las afueras del Hospital General de El Quemado se observan de ambos sexos y evidente escasez de recursos que se protegen de los rayos del sol bajo pedazos de telas y cartones.
Aseguran que ahí pasan los días y las noches en espera de noticias de sus familiares internados en la institución, además de un pase para pasar a verlos.
Sin embargo, se dan casos como el de Jorge Bernardino Nava, originario de El Playón, municipio de Acapulco, quien lleva 442 días sin poder ver a su padre, quien sufrió un accidente vehicular por lo que estuvo en coma 25 días.
Aseguró que no ha podido verlo porque “el de seguridad, un joven moreno, me dice que no paso, a fuerzas quiere mi pase, pero no tengo” porque dijo que tal vez lo extravió algún familiar que sí pudo ver a su padre.
Cabe señalar que en los alrededores del hospital no hay tiendas para comprar alimento o agua, tampoco vendimia y menos un albergue para pernoctar, por lo que los familiares de los pacientes deben esperar noticias o autorización de entrada al hospital y luego, de nuevo a esperar.