BOLETIN/CONGRESO
Chilpancingo, Gro.
16 de octubre del 2020.
Diputadas y diputados locales exhortaron a la Secretaría de Salud federal para que desarrolle acciones que permitan programar el suministro de medicamentos y otros insumos para el tratamiento oncológico infantil y los demás tipos de cáncer que padece la población, además de que informe el presupuesto neto que se ha invertido para garantizar el abasto de medicamentos a nivel nacional.
Lo anterior, a propuesta del diputado Alberto Catalán Bastida (PRD), quien también solicitó al titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios que informe cuál es la situación de la distribución de medicamentos en el país para la atención de los niños enfermos de cáncer.
Asimismo, que informe del cumplimiento de los contratos de compra de medicamentos oncológicos y cuáles son las responsabilidades del Estado Mexicano ante el robo de los mismos en los almacenes de la empresa Novag Infancia, S.A. de C.V., ocurrido el 4 de octubre del presente año en la Alcaldía de Iztapalapa.
Además, se exhortó al Ejecutivo estatal para que instruya a la Secretaría de Salud, como jefe de sector del Instituto Estatal de Cancerología, que envíe al Congreso un informe pormenorizado del procedimiento para la obtención de recursos para la prestación de la atención de los pacientes con cáncer, necesidades financieras para tener una cobertura al cien por ciento, y la inversión estatal directa en este rubro en este Ejercicio Fiscal 2020 y el proyectado para el 2021, así como el estado en que se encuentra el abasto de medicamentos.
En el documento, el legislador expresa que el problema de desabasto de medicamentos necesarios para el tratamiento del cáncer se viene presentando desde hace dos años, y la respuesta del Gobierno Federal es que se buscaría a los responsables del desabasto, culpando a las empresas farmacéuticas por concentrar el medicamento y encarecerlo.
Catalán Bastida dijo que la crisis sanitaria ha puesto al sistema de Salud en México en jaque, ya que previo a que se presentara la pandemia, las diferentes instituciones de salud en México ya presentaban grandes dificultades para garantizar el acceso oportuno a medicamentos, principalmente en pacientes con enfermedades crónico-degenerativas.